martes, 8 de junio de 2010

¡Bonita tú!


Quítate los zapatos y no hagas ruido, no vayamos a despertar a la lujuria, que está escondida y acechando para que nos comamos en cualquier momento, casi sin darnos cuenta. y volvió a pasar. en el medio segundo que tardamos en cerrar y abrir los ojos, saltó ella tan imponente como siempre, vestida de cuero negro y tacón de aguja. Supimos que estaba allí antes de verla, y acabamos rodando en el suelo rodando como una bola de nieve. la misma bola pequeña que mientras cae, crece y crece. y así crecimos. crecimos tanto que los pies se nos salían de la cama. nos creimos seres voladores. no pájaros, más bien bichitos, libélula y luciérnago. bonitas esdrújulas. bonita fantasía, bonita tú.